La mayoría de los directivos piensan que dar importancia a las emociones en el trabajo es poco profesional. En consecuencia, intentan desentenderse por completo de las influencias emocionales. Sin embargo, ser consciente de las emociones es vital para tomar decisiones eficaces.
Si los directivos descuidan las emociones en sus procesos de toma de decisiones, son vulnerables a tomar decisiones injustas en aras de la objetividad. Para tomar realmente las mejores decisiones en un puesto de liderazgo, hay que saber utilizar las emociones como herramienta en los procesos de toma de decisiones.
Reflexiona sobre el mejor jefe que has tenido hasta ahora en tu carrera. Probablemente pienses en alguien que se ganó tu respeto a la vez que era agradable.
En la mayoría de los casos, no querrás tener un jefe que intente ser tu mejor amigo. Pero tener un jefe con el que te lleves bien facilita mucho tu trabajo y puede minimizar los conflictos.
Si no tienes tanta suerte, puede que también hayas tenido un jefe tan centrado en la productividad que trataba a sus empleados como máquinas y no como individuos. Si ignoras las emociones en tus procesos de toma de decisiones, es más probable que tomes decisiones injustas.
Es esencial que aprendas a trabajar con las emociones en lugar de ignorarlas, porque las buenas decisiones deben ser equilibradas. Si reconoces tus emociones y separas las que son útiles de las que no lo son, serás un mejor líder.
El compromiso de los empleados es una forma de medir el grado de dedicación de tus empleados al éxito de tu empresa. Más que nunca, los empleados buscan puestos en los que se sientan apreciados y atendidos. Para la mayoría de los trabajadores no se trata solo del dinero.
Entonces, ¿cómo se fomenta el compromiso de los empleados basándose en esta definición? Se crea un entorno en el que los empleados se sienten dedicados a su puesto. Se trata principalmente de una conexión emocional, porque el aprecio de los empleados satisface las necesidades emocionales.
Puede ser difícil pensar en formas de fomentar un compromiso emocional adecuado en el lugar de trabajo. Apoyar las necesidades emocionales de tus empleados no significa que sea el momento de convertirte en su terapeuta.
Puedes mejorar el compromiso de tus empleados mediante estrategias sencillas, como establecer una mejor comunicación. Pregúntales cómo puedes ser un mejor colega o cómo puedes apoyar sus objetivos profesionales. Saber que su lugar de trabajo apoya su desarrollo personal puede contribuir en gran medida a mejorar la moral.
El compromiso de los empleados es importante para el bienestar de cualquier empresa y de sus empleados. Los empleados con bajo compromiso son más propensos a cometer errores por descuido, lo que puede tener impactos negativos en toda la empresa.
La mayoría de las veces, sólo hace falta un empleado descuidado para crear un gran problema, como una gran violación de datos. Si tu empresa no apoya eficazmente a sus empleados, eres más vulnerable a sus errores por descuido. Así que piensa en el compromiso de los empleados como una medida preventiva.
Un buen compromiso de los empleados suele ser un signo de éxito de la empresa. Los lugares de trabajo con un alto nivel de compromiso de los empleados obtienen más ingresos. Los empresarios suelen pasar por alto el compromiso de los empleados como factor que afecta a la productividad. Si un empleado siente lealtad hacia su empleador, se esforzará más en sus resultados.
La toma de decisiones emocionales eficaces es una habilidad que requiere práctica. Dado que las emociones y las experiencias de cada persona son diferentes, no todos utilizarán las mismas estrategias para sus procesos de toma de decisiones.
Sin embargo, he aquí algunos marcos que pueden servir de guía para ayudarte a descubrir cómo puedes utilizar eficazmente tus emociones para tomar decisiones.
Las emociones negativas, como el estrés excesivo, pueden distraerte de la búsqueda de una solución a tu problema. Puede ser fácil desviarse por inconvenientes menores que surgen cuando estás resolviendo un gran problema.
Mantén la concentración en la tarea que tienes entre manos. Si te distraes con cuestiones menores, anótalas a medida que surjan para poder seguir adelante y volver a ellas más tarde.
Encontrar una solución al problema principal y ajustarla después es más eficaz que dejar que la mente divague por todas las posibilidades menores.
Pensar en los posibles problemas de tu solución te convertirá en un solucionador de problemas más exhaustivo, pero tienes que centrarte primero en tu problema principal.
Lleva un registro de tus decisiones laborales importantes. Sé sincero con tu proceso de pensamiento y reflexiona sobre los resultados de tus acciones. Si llevas un registro de tus decisiones, podrás utilizarlo como recurso para resolver futuros problemas.
Un registro de proyectos centrado en tus procesos de pensamiento te ayuda a identificar patrones comunes en tu trabajo. Por ejemplo, puedes empezar a notar que dudas de tus habilidades de presentación, pero que siempre actúas bien en el momento.
Visitar estas emociones más tarde te ayuda a tener una visión más objetiva de cómo juegan en tu toma de decisiones para que puedas ser consciente de qué emociones se están interponiendo en tu camino hacia el éxito.
Si estás en una posición de liderazgo, es importante que pienses en el papel que tienen tus emociones cuando diriges a tu equipo. Las habilidades de comunicación tienen el mayor impacto en la eficiencia y el compromiso de tu equipo.
Considera la posibilidad de añadir una sección de comunicación separada a tu bitácora y haz check-in con frecuencia con los miembros de tu equipo para entender cómo puedes comunicarte eficazmente con cada uno de ellos. Las emociones desempeñan un papel importante en nuestro estilo de comunicación, por lo que juegan un papel en el compromiso de los empleados por asociación.
A veces, necesitas ayuda externa para descifrar tus emociones y su impacto en tu trabajo. Todo el mundo tiene que navegar por sus emociones en sus procesos de toma de decisiones, así que acude a los que te rodean para que te apoyen.
Un jefe, un colega o un amigo de confianza pueden ayudarte a descubrir si tus emociones se interponen en la solución de tus problemas. Lo más probable es que a veces necesiten una orientación similar, por lo que pueden ser recursos el uno para el otro. Tener un compañero de viaje para tomar mejores decisiones emocionales hace que el proceso sea mucho más fácil.
A menudo se pasa por alto que el compromiso de los empleados es un factor importante para el éxito de una empresa. Durante mucho tiempo, las empresas han subestimado el papel de las emociones en la satisfacción, la lealtad y la eficiencia de los empleados.
Por eso es tan importante tener en cuenta las emociones en la toma de decisiones y en los estilos de liderazgo. Cuando eres más consciente de tus propias emociones y sabes cómo influyen en tu toma de decisiones, te conviertes en un mejor líder.